La libertad de ser tú misma
Dejé de preocuparme por ser “agradable”.
Dejé de medir mis palabras para no incomodar.
Dejé de vestirme para cumplir expectativas ajenas.
y camino con la seguridad de quien ya no pide permiso para existir.
Porque el verdadero estilo no está en lo que llevas, sino en cómo te sientes contigo misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos sus comentarios