Vivir una pandemia en tiempos de desigualdad
Luz Rodea
Coordinadora de Medios y Comunicación para el programa de Acción
humanitaria
En cuestión de dos meses, la
propagación de COVID-19 ha retado las capacidades de más de 140 países y en
México ha generado discusiones sobre responsabilidad del Estado de contar con
infraestructura básica para hacer frente a esta enfermedad. Se ha discutido si
el sistema de salud está listo o no para atender todos los casos que se
presenten, si los filtros sanitarios son suficientes para disminuir el riesgo
de contagio y sobre todas las acciones que la ciudadanía debiese llevar a cabo
para evitar la propagación.
Entre los 148 millones de entradas que
los buscadores arrojan al respecto, lavarse las manos, mantenerse en casa y
evitar el contacto con personas enfermas; resaltan como acciones estratégicas,
pero ¿qué sucede cuando la situación en la que vives no te permite hacerlo?
*Para lavarte las manos, necesitas
agua.
Una tercera parte de la población del
país no cuenta con suministro diario de agua, de acuerdo con cifras del INEGI
(2018), es decir, alrededor de 44 millones de personas no tienen la posibilidad
de lavarse las manos frecuentemente durante 20 segundos, como es recomendado
para prevenir la enfermedad. De esa cantidad, al menos 8 millones 500 mil
personas no tienen siquiera acceso directo a agua en sus hogares, por lo que
tienen que buscar fuentes externas para recolectarla. Estas cifras no reflejan
la calidad del agua, ni si es apta para el consumo humano.
*Para mantenerte en casa, debes contar
con un trabajo que te permita no salir, pero sin poner en riesgo tu patrimonio.
El 56% de la población económicamente
activa en México trabaja de manera informal, lo que significa que, de inicio,
no cuentan con prestaciones laborales que les permitan quedarse en casa o
ausentarse unos días sin que eso represente inestabilidad o detener por
completo sus ingresos. Esto sin tomar en cuenta a aquellas personas que sí
cuentan con un trabajo formal, pero que no disfrutan de las condiciones para
trabajar desde casa, como las personas que trabajan en tiendas de autoservicio,
la industria maquiladora e incluso en el sector salud, quienes, además, no
siempre cuentan con días pagados por enfermedad.
*Para evitar el contacto con otras
personas, tendrías que evitar el trabajo de cuidados y, por supuesto, no vivir
en hacinamiento
La frase “sana distancia” se ha
replicado constantemente en los últimos días para hablar de la
corresponsabilidad ciudadana al evitar el contacto con población de riesgo o
que pudiese estar contagiada. Sin embargo, no considera lo difícil que es
mantener espacio cuando se vive en condiciones de hacinamiento, como los 9.8
millones de personas que no cuentan con espacios dignos de vivienda en el país
(CONEVAL).
Tampoco toma en cuenta los riesgos
generados por los roles de género hacia mujeres jóvenes, niñas y adultas
mayores, quienes ejercen diariamente labores de cuidado en sus hogares.
En otras palabras, la vulnerabilidad
que se genera a partir de la responsabilidad de cuidar y atender a otras
personas que se asigna por estereotipos de género y la amenaza que representa,
especialmente en adultas mayores, que en este caso se encuentran más
vulnerables a morir por la enfermedad.
La incertidumbre provocada por el
COVID-19 no es sólo porque no conocemos con exactitud el comportamiento del
virus, sino porque las desigualdades que enfrenta una gran parte de la
población mexicana simplemente les impedirán seguir las recomendaciones de las
autoridades sanitarias y eso será un factor determinante en el impacto de la
pandemia en nuestro país.
La crisis de desigualdad que vive
México representa una amenaza a la salud pública en sí misma y para reducirla
necesitamos empezar a hablar de mecanismos que combatan esta vulnerabilidad,
por ejemplo, un cambio en la estructura de recaudación que fortalezca los
ingresos del Estado de manera justa, es decir, donde las personas y empresas
con ingresos exorbitantes paguen lo que realmente les corresponde y esa carga
no recaiga en la población que necesita respuestas eficaces ante crisis como la
que estamos viviendo.
Foto principal tomada de https://www.ngenespanol.com/el-mundo/coronavirus-en-mexico-confirman-el-segundo-caso/ el
19 de marzo del 2020 a las 11:28 hrs.
Las opiniones expresadas aquí son responsabilidad del autor o autora y
no necesariamente reflejan la postura oficial de Oxfam México
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos sus comentarios