饾悕饾惃 饾惇饾惍饾悶饾惈饾悶饾惁饾惃饾惉 饾惉饾悶饾惈 饾惉饾惃饾惉饾惌饾悶饾惂饾悽饾悵饾悮饾惉. 饾悙饾惍饾悶饾惈饾悶饾惁饾惃饾惉 饾惉饾悶饾惈 饾悳饾惃饾惁饾惄饾悮饾惂̃饾悶饾惈饾悮饾惉.
Como si nosotras fu茅ramos un peso.
Como si nuestra existencia viniera con factura.
Hoy ese modelo est谩 agotado.
Las mujeres no necesitan ser sostenidas:
trabajan, piensan, deciden, crean, cuidan y tambi茅n sostienen a otros.
Lo que no necesitan es un v铆nculo basado en la superioridad masculina.
Un hombre que se asume como “soporte” suele exigir algo a cambio: obediencia, gratitud, control o silencio.
Eso no es amor. Es jerarqu铆a.
Un compa帽ero igualitario no “rescata”, no “mantiene”, no “aguanta”.
Comparte responsabilidades.
Escucha sin corregir.
No compite con la autonom铆a femenina.
No se siente menos porque una mujer no dependa de 茅l.
La verdadera crisis no es que las mujeres ya no necesiten hombres.
La crisis es que muchos hombres fueron educados para ser necesarios solo desde el poder.
Y eso, m谩s que incomodar, deber铆a invitar a reflexionar.
Porque amar no es sostener desde arriba.
Es caminar al lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos sus comentarios