Sentido de la conmemoración del Día Internacional del Trabajo Doméstico
Desde 1983 cada 22 de julioes una fecha para
dar visibilidad, divulgar información y articular acciones
para reconocer, valorar y resignificar el trabajo que
contribuye al sostenimiento de la vida, los hogares y el
entorno, y que, por la inequidad en su provisión ha sido
sobrecargado sobre millones de mujeres. Es una
conmemoración para evidenciar que todavía se requieren
muchos esfuerzos colectivos para garantizar el bienestar
de las personas que realizan trabajos de cuidado tanto de
forma remunerada como no remunerada.
¿Por qué cuidar es un trabajo? Porque se
trata de un conjunto de actividades materiales,
emocionales y técnicas que se realizan de forma
remunerada o no remunerada, y que, implican
conocimiento, tiempo y esfuerzo.
Esas actividades tienen
como resultado el provisionamiento de bienestar para las
personas, el mantenimiento de espacios en condiciones de
habitabilidad, el cubrimiento de necesidades de
alimentación, lavado de ropa, limpieza del hogar, cuidado
del ambiente, entre otras. Son labores que posibilitan que
las personas puedan participar en el mercado laboral,
disfrutar de tiempo libre, estudiar, etc. Todas las personas
necesitan comida, ropa limpia, una casa ordenada,
apoyo emocional, básicamente, ¡ninguna persona
sobrevive sin cuidado!
22J - Día Internacional del Trabajo Doméstico
reconocerlo, valorarlo y representarlo
como un TRABAJO, así como buscar que de manera
corresponsable los distintos actores involucrados
(Estado, sector privado, comunidad, hombres y
mujeres) garanticen el bienestar de las personas
que lo ejercen, y que son en su mayoría mujeres
(muchas de ellas migrantes, racializadas y empobrecidas)
quienes enfrentan profundas inequidades en términos de
calidad de vida y desarrollo de proyectos colectivos e
individuales.
Por eso es muy importante
¿CÓMO CONTRIBUIR CON
EL PROPÓSITO DE ESTA
CONMEMORACIÓN?
Si eres un ciudadano o ciudadana sé ejemplo para todas las
personas de tu hogar, barrio y comunidad siendo responsable de
las tareas domésticas y de cuidado: un paso importante para
lograr la igualdad de género es distribuir equitativamente los
trabajos de cuidado.
Si eres empleador o empleadora de una persona
trabajadora del hogar de forma remunerada reconócela
como sujeta de derechos laborales y cumple las
disposiciones legales: paga a tiempo su salario completo
y el subsidio de transporte, no olvides que todas las
trabajadoras del hogar de forma remunerada tienen
derecho a la prima en los meses de junio y diciembre, ten
presente que la jornada laboral de estas trabajadoras no
debe superar las 8 horas diarias si es un trabajo externo y
10 horas si es un trabajo interno, las horas extras deben
remunerarse, garantiza el acceso a prestaciones sociales
completas (pensión, salud y riesgos laborales), además tienen
derecho a cesantías, dotación y vacaciones.
Incorpora flexibilidad
en su horario laboral pues las distancias entre su hogar y el lugar
de trabajo pueden ser extensas.
Si vives en un hogar o trabajas una empresa donde contratan los
servicios de empleo doméstico, recuerda: no es la persona que
“te ayuda o que te apoya”, es una trabajadora, merece respeto y la
garantía de sus derechos.
Comparte la información a las personas cuidadoras de Bogotá
sobre los servicios que oferta el Sistema de Cuidado y conoce la
estrategia ¡A cuidar se aprende! Los encuentras en este enlace:
www.manzanasdelcuidado.gov.co
Si eres una persona cuidadora, puedes
acceder a los servicios de la siguiente
manera:
Contactándote con los números telefónicos o
correos institucionales del personal de la
Secretaría de la Mujer que apoya la coordinación
de las Manzanas del Cuidado (información que
encuentras en www.manzanasdelcuidado.gov.co)
Acercándote a las entidades ancla de las 19
Manzanas del Cuidado donde el personal de la
Secretaría de la Mujer que apoya la coordinación de
las Manzanas te brindará toda la información sobre
los servicios que tenemos para ti y tu familia.
También puedes acercarte a los Buses del Cuidado.
Consulta todo lo que necesitas saber aquí:
www.manzanasdelcuidado.gov.co
El reconocimiento de derechos de las
trabajadoras del hogar de forma remunerada,
específicamente, de quienes se emplean en el servicio
doméstico es un eje central de esta conmemoración. Una
ocupación altamente feminizada, pues a nivel nacional las
mujeres representan el 95% del total de las personas que
trabajan en este sector, y que, también está atravesada por
otras desigualdades asociadas a la discriminación racial,
económica, étnica y la situación migratoria. Además, debido
a la discriminación y desvalorización que se traduce en la
creencia de que el trabajo doméstico y de cuidado “no es
trabajo”, las mujeres que realizan estos trabajos enfrentan
grandes obstáculos para garantizar sus derechos
económicos.
En Bogotá, de acuerdo con datos de la
Gran Encuesta Integrada de Hogares, del total de
personas ocupadas en servicio doméstico para
2022, el 46% no cotizó seguridad social completa,
tan solo el 34% recibió prima servicios y el 13%
prima de navidad, 52% eran jefas de hogar, 44%
devengaron menos de un SSMLV y el promedio de
ingresos mensuales fue de $929.693 (GEIH, 2022).
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La redistribución del cuidado es fundamental para
constituir sociedades más equitativas entre hombres y mujeres,
para esto, es necesario balancear las responsabilidades de
cuidado en los hogares y la sociedad. Según datos de la Encuesta
Nacional de Uso del Tiempo del año 2020-2021, en Bogotá 9 de
cada 10 mujeres participan en los trabajos domésticos y de
cuidado no remunerados, en contraste, 7 hombres de cada
10 lo hacen. No obstante, se observa que en el tiempo
diario promedio dedicado a este trabajo, las mujeres
bogotanas dedicaron 6 horas y 43 minutos, 4 horas más
que los hombres. Esta brecha se mantiene
independiente de la edad de la mujer, actividad principal
que ejerza y rol que tenga dentro del hogar: entre las
personas de 29 a 44 años, la brecha aumenta a 5 horas y
53 minutos; entre las personas ocupadas la brecha es de
4 horas y 22 minutos; y entre jefes de hogar, la brecha
llega a ser de 3 horas y 46 minutos (ENUT, 2020-2021).
Esto hace el Distrito para aportar al bienestar
a las personas que proveen cuidados
El Sistema de Cuidado de Bogotá que por iniciativa del Consejo
Consultivo de Mujeres y con apoyo del Concejo de Bogotá fue
institucionalizado a través del Acuerdo 893 de 2023, es el primer
sistema local de Colombia como una apuesta política innovadora
que articula servicios existentes y nuevos con el objetivo de
reconocer, redistribuir, y reducir el trabajo de cuidado no
remunerado bajo un modelo de corresponsabilidad entre Estado,
sector privado y comunidad1
.
La reducción de las cargas de cuidado de las
mujeres es indispensable para su desarrollo educativo,
profesional y disfrute de espacios de descanso, debido a que, les
permite recuperar tiempo y autonomía sobre sus propias vidas.
Para que esto sea posible es necesario el cambio de imaginarios
relacionados con los roles de género en la sociedad, por ejemplo,
en Bogotá el 38% de hombres y mujeres consideran que las
mujeres son mejores para el trabajo doméstico que los hombres
(ENUT, 2020-2021).
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1Acuerdo 893 de 2023 “Por el cual se institucionaliza el sistema distrital de
cuidado de Bogotá D.C. Y se dictan otras disposiciones”.
También cuenta con
un mecanismo de participación intersectorial que estableció el Decreto 237
de 2020, el cual creó la Comisión Intersectorial del Sistema Distrital de
Cuidado.
con el objetivo de reconocer, redistribuir, y reducir el
trabajo de cuidado no remunerado bajo un modelo de
corresponsabilidad entre Estado, sector privado y
comunidad .
Este sistema de cuidado opera con una oferta articulada de
servicios de los diferentes sectores del Distrito focalizados
en:
1. Personas cuidadoras, 2. Personas que requieren cuidado
y/o diferentes niveles de apoyo, 3. Hombres y familias de las
personas cuidadoras. Dentro de los servicios para las
personas cuidadoras se encuentra: formación para el
fortalecimiento de capacidades (educación básica, media,
técnica, tecnológica y profesional, formación
complementaria, homologación de saberes, educación
financiera, entre otras); respiro para brindar condiciones de
bienestar y contribuir al cuidado de la salud física, mental
y emocional (salud, cultura, recreación y deporte,
acompañamiento psicosocial y jurídico, tiempo
propio para cuidadoras: modalidad lavandería
comunitaria, cuidado de animales) y
generación de ingresos que contribuyen
con la autonomía económica (ruta de
emprendimiento y formalización, ruta de
empleo, programas que fortalezcan las
capacidades de las personas
cuidadoras y estrategias que
fomenten su empleabilidad y
emprendimientos).
22J - Día Internacional del Trabajo Doméstico
Así mismo, el Sistema cuenta con servicios de cuidado y
desarrollo de capacidades a través de actividades lúdicas,
pedagógicas, recreativas, culturales y deportivas, entre otras, que
promueven el ejercicio pleno de los derechos, la autonomía y
vida independiente de las personas en sus diferencias y
diversidades que requieren cuidado o diferentes niveles de apoyo
y servicios de transformación cultural que contribuyen a la
eliminación de estereotipos sexistas, discriminatorios y violentos,
así como con el reconocimiento, la redistribución y la reducción
del trabajo de cuidado, a través de acciones pedagógicas de
sensibilización, formación y ampliación dirigidas a los hombres y
las familias de las personas cuidadoras. Esta oferta de servicios
llega a la ciudadanía en Bogotá a través de (4) formas: 1. Las
Manzanas del Cuidado, 2. Los Buses del Cuidado, 3. La asistencia
personal o domiciliaria y 4. Unidades Operativas del Cuidado.
En la actualidad, el Sistema de Cuidado de Bogotá cuenta con 19
Manzanas del Cuidado, 2 Buses del Cuidado (uno urbano y otro
rural) y se han implementado cuatro (4) programas de Asistencia
Personal y Domiciliaria en 19 localidades de Bogotá. Hasta el mes
de mayo del presente año, las manzanas del cuidado han
brindado 445.594 atenciones: 178.422 en los servicios
encaminados al respiro de personas cuidadoras; 138.773 en
formación; 78.743 atenciones en cuidados a niñas/os, personas
con discapacidad y personas mayores; 30.066 en programas
encaminados a generación de ingresos; y 19.590 en
transformación cultural.
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