La actriz Dorothy Newell fue una sensación nacional en 1915 cuando pintó su demanda de igualdad de derechos en su espalda, menos de un mes después de que decenas de miles de mujeres marcharon por la Quinta Avenida. Dos años después, Nueva York permitió que las mujeres votaran, y en 1920, la nación lo hizo. Se necesitó una campaña sostenida lanzada en 1848 para ganar el voto de las mujeres que la Constitución de los Estados Unidos les negó.
FOTO DE GEORGE RINHART, CORBIS / GETTY IMAGES
¿Por qué el futuro debería ser femenino?
Nuestra escritora dice que es hora de que las mujeres rechacen el estatus inferior, exijan igualdad y se disculpen sin pedir disculpas por su ambición y éxito.
ENSAYO DE
Es una cita ampliamente atribuida a Eleanor Roosevelt , y fue un regalo maravilloso para una joven que se embarca en el mundo.
Ojalá hubiera guardado ese pequeño trozo de papel. Por un tiempo estuvo en mi billetera, y luego, después de que se deshilachó y se puso un poco sucia, la puse dentro de una horquilla brillante y la guardé en un cajón con joyas y recuerdos. Después de varios años y varios movimientos, perdí el rastro, pero siempre he tratado de aferrarme firmemente a la idea de que tenemos el poder de rechazar cualquier intento de hacernos sentir pequeños o subordinados.
La palabra clave es "sentir". Como mujer afroamericana, mi madre era muy consciente de que una persona, y una mujer en particular, podía ser empujada a un rango inferior de una manera muy real y profunda. Las leyes podrían dictar dónde podría vivir o trabajar y si podría obtener una licencia comercial o ser propietario o votar. Las costumbres y las costumbres sociales y los verificadores de estado autonombrados podrían mantenerlo fuera de la sala de juntas o la casa club. Pero en realidad nadie tiene el poder de alcanzar dentro de su alma y bajar el control de su confianza en sí mismo.
Mi madre tiene una fuerte ética de trabajo, pero también tiene una feroz "ética digna". La autoestima frente a la opresión es su superpoder.
Esa palabra, poder, adquiere diferentes dimensiones vistas a través de una lente de género. El poder se asocia con mayor frecuencia con la fuerza, que a su vez está vinculada a la destreza física o al poder financiero. La suposición predeterminada es que toda la sociedad se beneficia cuando los hombres son criados para hacerse poderosos: sus familias, sus comunidades, sus lugares de trabajo y culto. Cuando las mujeres hablan de ejercer poder o de ejercer su poder colectivo al unirse, las suposiciones son muy diferentes. Con demasiada frecuencia es visto como un juego de suma cero, en el que las mujeres ganan poder a expensas de los hombres y en peligro de la sociedad en general.
mujeres tienen una ventaja distintiva en lo que respecta a la resistencia y la supervivencia a largo plazo .
Entonces, ¿por qué los hombres tienen más poder que las mujeres hoy? ¿Por qué persiste la desigualdad de género? La explicación es muy frecuente: es como siempre ha sido. Eso simplemente no es lo suficientemente bueno. Y esa justificación debería desmoronarse ante la evidencia que muestra que los lugares con políticas que obstaculizan u oprimen a las mujeres pierden terreno económicamente.
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